El próximo 26 de junio darán inicio las audiencias del juicio por el intento de asesinato de Cristina Kirchner. Los acusados son: Fernando Sabag Montiel, el fallido perpetrador. Brenda Uliarte, su novia, y Gabriel Carrizo, jefe y dueño del carro de copos de azúcar que utilizaron para hacer inteligencia durante los días previos al 1 de septiembre de 2022. A diferencia de lo que pretende CFK y su equipo de abogados, el Tribunal Oral Federal 6 se enfocará en el hecho material y no en la “pista política” o en la figura del autor intelectual. Esto significa que la hipótesis Milman y la idea de que Revolución Federal pudo haber estado detrás de la intentona, quedaron descartadas por falta de pruebas y por testigos truchos, como el tal Abello que dijo haber oído al diputado Milman jactándose de lo que le sucedería a la expresidenta.
El asunto del celular “borrado y roto” de Montiel sí será aprovechado por la defensa para instalar la semilla de la conspiración a escala planetaria. Al respecto, y en el marco de una causa que investiga cómo se perdió ese teléfono, el tirador Montiel dijo que lo revisaron y manipularon durante 24 días y luego “lo destruyeron”. El objetivo era “generar dudas” sobre sus vínculos con Revolución Federal y el diputado del PRO Gerardo Milman. “Los medios manejados por el kirchnerismo tejían toda la falsa historia. (…) Se inventó que el Poder Judicial estaba persiguiendo al kirchnerismo y por esa razón querían apresar o mandarla a matar a Cristina.
Esa fue una de las grandes mentiras que cree la gente” aseguró el principal implicado. Por su parte, la querella de Kirchner insistirá con la necesidad de “saber si los tres imputados actuaron en conjunto con otros actores o si fueron impulsados por terceros”. Cae de maduro que la víctima y testigo estrella irá por el complot internacional. Es más tolerable decir que las altas esferas del mal, el macrismo y el gorilismo, gestaron el crimen, que aceptar que un grupo de lúmpenes enemistados a muerte con CFK quisieron asesinarla por cáncer del país y ladrona perdida. Justo los que debían glorificarla: los descamisados y parias del nuevo siglo.
Habrá más de 220 testigos y pilas de vídeos, testimonios y documentos. En caso de que no forme parte del expediente, dejo por aquí un video con un ángulo desapercibido de la secuencia. Difícilmente CFK se haya dado cuenta del atentado mientras veía las noticias (como falseó en su testimonial). Lo supo no bien le gatillaron. Montiel estaba de frente y se aseguró de que ella lo viera.
La historia de que nunca supo lo que había sucedido no es otra cosa que la mentira original.
Esteban Fernández
